Se trata de un ensayo sobre la eliminación del campo de fútbol de Sevilla y su sustitución por usos alternativos que generen una nueva centralidad urbana en su lugar. Lejos del mantenimiento de murales, por el que opta la OPS, proponemos que los símbolos a mantener sean el rectángulo de juego y el uso, el deportivo genérico. Ambas decisiones tienen cabida en un parque actual que supera la condición del viejo: ornamental y contemplativo. Por otra parte, la misión del edificio o edificios a construir no es la de contención formal de la gran escala del parque sino la de controlar e interrelacionar los usos y espacios que ambos se ofrecen entre sí. En este sentido el parque ha de abrirse en espacios y usos a lo edificado y lo edificado en espacios y usos al parque para que ambos culminen el símbolo esperado en un equilibrio que pensamos será más poderoso y de mayor claridad si no son fragmentarias las partes, esto es: si la relación se establece entre un parque unitario y un edificio único.

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Fecha: 2001
Autor: Ignacio de la Peña Muñoz (arquitecto).
Promotor: OFICINA DEL PLAN DE SEVILLA DE LA GERENCIA MUNICIPAL DE URBANISMO DE SEVILLA.